
Informe Confidencial
La identidad del presunto determinador del crimen estaría plenamente establecida, lo mismo que de los sicarios que fueron encargados de cometer el crimen.
A José Leonardo Guevara Rodríguez, lo asesinaron dos sicarios que se movilizaban en una motocicleta, propinándole dos disparos en el tórax y otros dos en la cabeza el pasado viernes 21 de mayo hacia las seis de la mañana, cuando salía de su vivienda en el barrio Venecia de la comuna Dos de la ciudad Pitalito.

Informes confidenciales obtenidos por SVCNoticias.com establecieron que la principal hipótesis que manejan los investigadores de la Policía Judicial y el Cuerpo Técnico de Investigación (C.T.I.) de la Fiscalía, sería una querella judicial adelantada en el Judgado Único Judicial del Circuito de Pitalito Huila, donde habría un fallo condenatorio contra un patrón que negó algunas pretensiones laborales.

Origen de la querella
José Leonardo habría laborado en un negocio de abastos de la ciudad de Pitalito, donde sufrió un accidente laboral, por el cual su patrono no quiso responder. Además, no lo había vinculado formalmente a seguridad social, por lo que tuvo que sufragar de su propio pecunio los gastos generados por dicho accidente.
También puedes leer:

El hecho de ser ciudadano venezolano habría causado que el patrón lo vinculara a un trabajo no formal, subestimando o desconociendo los derechos de las personas en esta materia.
Posterior a ese hecho, el señor Leonardo, mediante apoderado judicial, interpuso una demanda laboral reclamando sus derechos. El fallo en primera instancia habría obligado al propietario del abasto a pagar una suma cercana a los treinta millones de pesos.


Sin embargo, hasta la fecha antes de su muerte, el demandado no pagó dicha deuda aboral, sino que al perecer y de acuerdo a informes confidenciales, habría proferido amenazas al antiguo trabajador. De acuerdo a esta información, la víctima no instauró la correspondiente denuncia penal por estas amenazas y solo a su abogado le habría contado de dichas amenazas.

La identidad del presunto determinador del crimen estaría plenamente establecida, lo mismo que de los sicarios que fueron encargados de cometer el crimen, por lo que sería cuestión de tiempo para lograr que un Juez de Garantías emita una orden de captura.